En la reunión del Comité de Representantes de la ALADI, realizada en Montevideo, Bolivia presentó una propuesta de Acuerdo de Alcance Parcial Agropecuario para promover el Comercio de la hoja de coca y sus derivados. Once de los trece países de ALADI valoraron positivamente la propuesta de Bolivia, expresando el interés en la propuesta y manifestando que se iniciarán los análisis internos correspondientes con miras a formar parte de la iniciativa boliviana, acordando un plazo razonable para volver a abordar el tema.
El acuerdo propuesto dispone la investigación de propiedades científicas, alimenticias y medicinales de la hoja de coca y el abordaje de procedimientos y acciones concretas que se deben implementar para promover el comercio de la hoja de coca y sus derivados lícitos entre los miembros de la ALADI, en el marco de los compromisos internacionales adoptados por estos países.
El Representante de Bolivia, Benjamín Blanco, expreso que Bolivia quiere compartir al mundo las bondades de la hoja sagrada y de sus innumerables propiedades que la convierten en un producto único por sus usos culturales, medicinales y alimenticios.
Explicó también que mientras algunos países como Estados Unidos vienen aprovechando la hoja de coca, siendo el primer importador a nivel mundial de este producto, los países de la Asociación no registran importaciones, debido a la falta de normativa interna que defina los procedimientos y habilite la importación, tema que hasta la fecha no ha sido abordado en la región.
En el año 2009 Bolivia propuso enmendar la Convención Única de 1961 rechazando la actitud colonial y segregacionista sobre las prácticas culturales de los pueblos indígenas y pidiendo se eliminarán dos subapartados del artículo 49 que prohíben la masticación de la hoja de coca, lastimosamente un grupo de países encabezado por los Estados Unidos presentó objeciones con lo que la propuesta de enmienda quedó bloqueada, razón por la cual Bolivia denunció la Convención Única de 1961, volviéndose a adherir en 2013 con una reserva sobre la masticación de la hoja de coca, despenalizando así el akulliku en Bolivia.
El acuerdo tiene como fin además de promover la investigación científica, la adopción de procedimientos que permita aprovechar en la región las bondades de un producto que hasta ahora fue satanizado e injustamente penalizado. Dicho acuerdo se enmarca dentro de los instrumentos jurídicos establecidos en el Tratado de Montevideo de 1980.
Montevideo, Uruguay, 11 de septiembre de 2015